9/11/2012

ANTES MUERTA QUE ANTEOJUDA

Hoy fui al Oftalmólogo.
Desde chica mi madre me decía que yo era bizca y se la pasaba llevándome al Santa Lucía para que nos mandaran de vuelta a casa con una palmadita en la espalda..."La nena está bien".
La " nena " devenida en "señora" (dicho sea de paso, me ROMPE SOBERANAMENTE LAS PELOTAS QUE ME DIGAN SEÑORA Y ME TRATEN DE USTED!), ha notado ultimamente lo que su madre hace cientos de años. Si no estoy bizca, le pego en el palo.
El doctor de ojos -especialista en estrabismo-, un simpático increíble de esos que ya no quedan, estilo Robin Williams en la peli Patch Adams. Me llamó a los gritos, me revisó los ojos de todas las maneras posibles, me los midió dos veces, me hizo fondo de ojos, me tomó la presión y concluyó: "Es el alma." "Naque".
Me recetó DOS!! pares de anteojos que no pienso ni hacerme ni usar y unas gotitas para lubricar las córneas.
Estás vieja mamita. No ves un pomo.